Ubicado en pleno corazón de Santiago, a un costado de la emblemática Iglesia de San Francisco —la construcción más antigua de la capital—, el Museo de Arte Colonial de San Francisco se alza, debido a su antigüedad, como uno de los espacios patrimoniales más significativos del país. Cabe señalar que el conjunto arquitectónico fue declarado Monumento Nacional el año 1951.
Inaugurado el 4 de octubre de 1969, este museo nació como un gesto generoso de los franciscanos de Chile, quienes decidieron compartir con la comunidad su invaluable patrimonio artístico, cultural y arquitectónico. Desde entonces, el museo alberga la más importante colección de arte colonial en Chile, un verdadero viaje a través de la cultura de los siglos XVII y XVIII que mezcla la cultura europea e indígena.
El recorrido por el museo comienza en la Sala Sacristía, un espacio sagrado para los religiosos. Es en esta primera sala donde se encuentra una obra especialmente significativa: el árbol genealógico de la orden franciscana, una monumental pintura que representa las distintas etapas y ramificaciones de la orden. Además, en la misma sala se encuentra la exposición temporal “La Trama Sagrada. Textiles Litúrgicos de la Colección de San Francisco”, una muestra que invita a adentrarse en el mundo de los ornamentos litúrgicos y la profunda conexión entre el arte textil y la espiritualidad.
Distribuidas en seis salas, sus obras dan cuenta del legado hispanoamericano. Uno de los mayores tesoros del museo es la majestuosa Serie de la Vida de San Francisco, compuesta por 54 óleos pintados en Cusco entre 1668 y 1684. Este conjunto, encargado, especialmente para el convento, relata con detalle la vida del fundador de la orden franciscana y constituye una joya del arte colonial andino.
La colección no solo abarca pinturas, dentro del espacio se pueden encontrar piezas de imaginería religiosa, orfebrería, herrería, muebles coloniales y objetos litúrgicos, muchos de los cuales han sido resguardados por la orden durante siglos. Entre los espacios más destacados se encuentran la Sala Capitular —que alberga obras como La Virgen con el Niño, San Francisco y Santa Clara, del italiano Angelino Medoro—, y la Sala San Pedro de Alcántara, con obras de Francisco Isidoro de Moncada, realizadas en Cusco a mediados del siglo XVIII.
Otro rincón interesante al interior del museo es la Sala Gabriela Mistral, dedicada a la célebre poeta chilena, quien en su testamento donó al pueblo de Chile la medalla y el pergamino del Premio Nobel de Literatura que recibió en 1945, bajo la custodia de la orden franciscana. Junto a ellos, se pueden encontrar objetos personales como su biblia, rosario y crucifijo, cartas, fotografías y otras distinciones
Imperdible es el patio del convento, un acogedor jardín que se encuentra entre habitaciones, salas y la iglesia. Un verdadero oasis dentro de la ciudad, con árboles centenarios, una pileta con tortugas y peces, así como pavos reales y gallos que caminan libremente, dando una atmósfera tranquila y acogedora, lejos del bullicio de la Alameda.
Los antiguos pasillos, el patio silencioso y las salas llenas de historia, invitan a una pausa en medio del caos urbano, ofreciendo un lugar para la reflexión y el conocimiento.
Convento de San Francisco
Fue fundado en 1554 por los primeros franciscanos que llegaron a Chile y sigue siendo hogar de los frailes hasta el día de hoy. El edificio actual y su templo son la construcción colonial más antigua de la capital y las únicas en sobrevivir a nuestra historia sísmica.
EI templo conserva en su Altar Mayor la imagen de Nuestra Señora del Socorro, una pequeña escultura de la Virgen traída por el conquistador Pedro de Valdivia y que los franciscanos han resguardado por más de 400 años; su nave central posee los arcos y muros de piedra originales, así como un excepcional artesonado de madera de ciprés iniciado en 1584
Este Convento es la sede de la Provincia Franciscana de la Santísima Trinidad desde 1565 y fue declarado Monumento Nacional en 1951. Junto a su valor arquitectonico e historico, posee una de las colecciones de arte colonial más importantes del continente, entre cuyas obras destaca la Serie de la Vida de San Francisco, el cuadro colonial más antiguo de Chile, e/ Cristo de Bernardo O'Higgins y el Premio Nobel de la poetisa Gabriela Mistral. La protección de este importante patrimonio empujo, por parte de la Orden Franciscana de Chile, la creación del Museo de San Francisco en 1969, que simboliza el compromiso por compartir su historia con la ciudadanía.
- REFERENCIAS:
https://semanaeducacionartistica.cultura.gob.cl/contenidos/museo-de-arte-colonial-de-san-francisco/https://www.santiagoturismo.cl/museo-de-arte-colonial-de-san-francisco/https://fondogabrielamistral.cl/sala-gabriela-mistral/https://cinechile.cl/pelicula/museo-de-arte-colonial-de-san-francisco/